14 de septiembre de 2006

La vigencia de los Recuerdos II


Homenaje al versolibrismo

Hoy sé que podría enamorarme del color de tus mármoles,
del olor de tus museos o del sabor de tu piel curtida y ajada,
y yacer contigo en unos eternos momentos de éxtasis,
pero, por más que hiciese, por más que sintiese,
nada podría(ni tan siquiera podrá) igualarse a la vez primera,
cuando, inocente como aquella loba, me llenaste al mostrárteme
con tus noches, tus mil y una fragancias y tu esplendor redomado.

Sé que no podría morir sin besar de nuevo tus labios, o sin visitar
de nuevo tu inabarcable cuerpo, o sin mirar tus infinitos cabellos...
Sé, sencillamente, que eres la vuelta de Amor.

No hay comentarios: